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Una de las localidades más pequeñas y de mayor personalidad histórica de la comarca es Belvís de Monroy, con un notable pasado que en la Baja Edad Media la convirtió en el pueblo principal de una amplia zona. Hoy conserva varios monumentos, encabezados por el imponente castillo, emblema histórico del Campo Arañuelo y a cuyas vistas debe el nombre el municipio: Belvís, “bella vista».
Tiene acceso directo desde la autovía a menos de 5Km y la cercanía a Madrid propia de toda la comarca. Dispone, además, de un aeródromo que, como otros, se usa primordialmente como pista forestal. Tiene dos núcleos de población: Belvís (318) y Casas de Belvís (302 hab).
Cuenta con una de las rentas per cápita más elevada de la zona y, a pesar de sus pocos habitantes.
El Ayuntamiento tiene previsto crear una residencia de mayores, que contaría con 20 plazas y un centro de día para otras 20 personas. Los servicios sociales están atendidos por una trabajadora social. Además, ofrece asesoramiento a los empresarios a través de un agente de empleo y desarrollo local y está creando un polígono industrial.
El municipio cuenta con una red wifi gratuita y buena cobertura 4G.
Destaca el alcornoque singular de la Dehesa Boyal, de 250 años de edad, y varios senderos y rutas turísticas.
Belvís está apenas a veinticinco minutos del Parque Nacional de Monfragüe y la zona es excelente para el avistamiento de aves.
Una oficina de turismo, ubicada en la La Cárcel (s. XV/XVI), la única de la comarca junto a la de Navalmoral de la Mata, expresa las potencialidades turísticas de un municipio que tiene, como principales monumentos artísticos:
Fiestas
Belvís de Monroy es una localidad idónea para emprender actividades empresariales relacionadas con el turismo, como restaurantes y establecimiento.
Está creando un polígono industrial.
Dehesa Boyal UN ESPACIO COMÚN DE APROVECHAMIENTO GANADERO
El Ayuntamiento de Belvís de Monroy es propietario de una dehesa boyal de 239 hectáreas y de una finca municipal de 45. Se aprovecha el pasto y la leña por parte del vecindario. La leña se usa libremente y el pasto por lotes y suertes y con sujeción a unas normas. El Ayuntamiento los ofrece cada año a los ganaderos de vacuno y caballar mediante el registro y pago de la tasa correspondiente. El vuelo fue comunal hasta los primeros años de este siglo, que se desafectó por falta de uso durante los anteriores cincuenta años al desaparecer las encinas y hacerse el polígono industrial. La gestión de esta dehesa boyal es una experiencia de aprovechamiento colectivo de un patrimonio público.
